DE LO MUCHO QUE ODIO LA MEDICINA. DE POR QUÉ LA QUIERO TANTO.

Un sentimiento compartido. Sólo las pasiones pueden despertar el amor y el odio en igual medida, las ganas de dejarlo y el impulso de seguir luchando, de seguir siendo el capitán de un barco que navega en una noche de tormenta en alta mar. Y es que, al fin y al cabo, el amor es una conquista del día a día.

about me in neverland

Odio la medicina. Lleva por lo menos un año y medio decepcionándome.

Odio esta carrera que lo reduce todo a datos, nombres, descripciones, más datos y más descripciones. Y más nombres. Odio reducir a los enfermos a sus enfermedades.

Odio el poquísimo caso que se nos hace a los estudiantes. Porque no somos residentes. Y ya tendremos tiempo de aprender. Odio mirar y no tocar. Odio centrarme en no molestar demasiado.

Odio tener que estudiar una carrera de seis años, en la que la mitad de las competencias adquiridas se fugan por los huecos de un cerebro cansado de almacenar conocimientos abstractos. Pero sobre todo, lo que sin duda más odio, es no poder sentirme útil en absoluto. Odio tener que esperar siete años para empezar a aprender de verdad.

La carrera de medicina es un poquito fraude. Un trámite. La base para llegar a la punta del iceberg, que…

View original post 439 more words

Leave a comment